Habrá que decidirse y dar la mano
a todo lo que llega lentamente
con sed de oscuridad... Para poderlo ver
no como un sueño inaccesible, no,
más bien como corriente luminosa
y nueva y más profunda, sin descanso,
como pacífico oleaje
que baña nuestros ojos diferentes.
Vicente Valero. Libro de los trazados. Tusquets, 2005
No hay comentarios:
Publicar un comentario