con una agilidad que Nijinsky hubiera envidiado.
Coreografía ensayada millones de años.
Se juntan sin hundirse, toman su fuerza
de la corriente y el abismo, logran
la pareja perfecta, el amor total.
Cumplen con creces lo esperado de ellos.
Tratamos de imitarlos y no es lo mismo.
* José Emilio Pacheco
Tienen la elegancia de las pajaritas.
ResponderEliminarUn beso
Buena elección. Naturalito. Orgnánico.
ResponderEliminarSaludos.
Gemma, resulta difícil apartarse de la educación de la belleza formal que recibí, para bien o para mal.Un abrazo.
ResponderEliminarGracias por tu comentario, Melqui, lo rganico nunca falla.